La primera vez que probé esta tarta de queso triple chocolate, supe que había encontrado un tesoro culinario que cambiaría para siempre mis reuniones familiares. Durante años, buscaba el postre perfecto que combinara la cremosidad del cheesecake con la intensidad del chocolate, hasta que finalmente perfeccioné esta receta que ahora comparto con vosotros. Sin duda, esta delicia aterciopelada con su base crujiente de galletas Oreo ha sido la protagonista de incontables celebraciones en mi hogar, provocando siempre suspiros de placer entre los invitados.
Author:Maria
Prep Time:20 minutos
Cook Time:60 minutos
Total Time:1 hora y 20 minutos
Yield:8 porciones 1x
Category:Postre
Method:Horneado
Cuisine:Americana
Ingredients
Scale
Para la base:
22–24 galletas Oreo, trituradas
3 cucharadas de mantequilla derretida
Para el relleno:
900–1350 g de queso crema a temperatura ambiente
1 taza de azúcar granulada
3 huevos grandes a temperatura ambiente
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 taza de crema agria o yogur
225 g de chocolate semi-amargo o negro, derretido
1/4 taza de cacao en polvo sin azúcar
1 cucharadita de café espresso en polvo (opcional)
Para la cobertura de ganache:
1 taza de nata para montar
225 g de chocolate semi-amargo o negro
Instructions
Preparación de la base
Preparación inicial: Precalienta el horno a 175°C (350°F) y engrasa un molde desmontable de 23 cm.
Elaboración de la base: Tritura las galletas Oreo en un procesador de alimentos hasta obtener migas finas. Alternativamente, colócalas en una bolsa hermética y machácalas con un rodillo. Combina estas migas con la mantequilla derretida hasta conseguir una textura similar a la arena húmeda.
Formación y horneado: Presiona firmemente la mezcla de Oreo en el fondo del molde desmontable engrasado. Hornea durante unos 8 minutos para que se asiente, luego déjala enfriar completamente.
Preparación del relleno
Batido del queso: En un recipiente grande, bate el queso crema utilizando una batidora de pie o eléctrica hasta que quede suave y cremoso.
Incorporación del azúcar: Añade gradualmente el azúcar al queso crema mientras continúas batiendo hasta que se integre completamente.
Adición de huevos: Incorpora los huevos uno a uno, batiendo a velocidad baja para evitar introducir demasiado aire en la mezcla.
Integración del chocolate: Derrite el chocolate semi-amargo o negro y deja que se enfríe ligeramente antes de añadirlo a la mezcla de cheesecake.
Enriquecimiento del sabor: Agrega el cacao en polvo, el extracto de vainilla y el café espresso en polvo (si lo deseas) para potenciar el sabor a chocolate. Finalmente, incorpora la crema agria o yogur para crear un relleno excepcionalmente cremoso.
Horneado y enfriamiento
Vertido y horneado: Vierte el relleno de chocolate sobre la base enfriada, alisa la superficie con una espátula y coloca el molde en el horno precalentado.
Tiempo de cocción: Hornea la tarta a 175°C durante aproximadamente 50-60 minutos. El centro debe estar cuajado pero aún ligeramente tembloroso. Opcionalmente, puedes hornear usando un baño María para prevenir grietas.
Enfriamiento gradual: Apaga el horno y entreabre ligeramente la puerta para permitir que la tarta se enfríe gradualmente durante una hora.
Refrigeración: Transfiere la tarta a una rejilla para que se enfríe completamente, luego refrigérala durante al menos 4-6 horas, o idealmente toda la noche, para que cuaje correctamente.
Finalización con ganache
Preparación del ganache: Calienta la nata hasta que esté humeante (pero sin hervir), luego viértela sobre el chocolate picado en un recipiente. Deja reposar un momento antes de remover hasta obtener una mezcla homogénea.
Cobertura final: Vierte el ganache uniformemente sobre la tarta refrigerada, extendiéndolo suavemente para cubrir toda la superficie. Refrigera durante 30 minutos adicionales para que el ganache se endurezca.
Notes
Utiliza ingredientes a temperatura ambiente para conseguir una textura más sedosa en el cheesecake.
Evita las grietas horneando con un baño María y enfriando la tarta gradualmente.
Personaliza el postre experimentando con diferentes tipos de chocolate, capas de frutos secos o remolinos de frutas.
Para un desmoldado perfecto, pasa un cuchillo caliente por el borde de la tarta antes de abrir el molde desmontable.
Si no tienes café espresso en polvo, puedes sustituirlo por café instantáneo molido muy fino.