La primera vez que probé este pollo parmesano en Longhorn Steakhouse, quedé absolutamente fascinado por la combinación perfecta de texturas y sabores. Aquella experiencia me llevó a experimentar en casa hasta conseguir recrear este plato emblemático. Durante años, he perfeccionado esta receta hasta lograr esa capa exterior crujiente y dorada, coronada con una irresistible mezcla de quesos derretidos que se estira al cortar el pollo.
En nuestra familia, este platillo se ha convertido en una tradición para las cenas de los viernes, cuando queremos algo especial pero sin complicaciones excesivas. Incluso mis hijos, habitualmente reacios a probar nuevos platos, esperan con ansias el día del “pollo con queso crujiente”, como ellos lo llaman. A través de esta receta, espero traer a tu hogar un pedacito de esa magia culinaria que combina lo mejor de la cocina americana con los sabores tradicionales italianos.
¿Por qué te encantará esta receta?
Este pollo parmesano tiene características que lo convierten en un plato verdaderamente especial:
- Equilibrio perfecto de texturas: El contraste entre la cobertura crujiente y el interior jugoso del pollo crea una experiencia sensorial incomparable.
- Explosión de sabores complementarios: La combinación del suave pollo con el intenso sabor de los quesos italianos y las hierbas aromáticas resulta en un perfil de sabor complejo pero armónico.
- Versatilidad sorprendente: Funciona tanto para una cena familiar cotidiana como para ocasiones especiales con invitados.
- Técnica sencilla pero impresionante: Aunque parece un plato de restaurante, la preparación es accesible incluso para cocineros principiantes.
- Ingredientes comunes: No necesitarás buscar productos exóticos; todos los ingredientes pueden encontrarse en cualquier supermercado.
Además, este plato ofrece la satisfacción de recrear en casa una receta de restaurante por una fracción del costo, sin sacrificar sabor ni presentación.

Ingredientes
Para el pollo:
- 4 pechugas de pollo deshuesadas y sin piel (aproximadamente 150-180g cada una)
- ½ taza de harina de trigo común (60g)
- 2 huevos grandes
- ¼ taza de leche (60ml)
- 1 taza de pan rallado estilo italiano (100g)
- 1 cucharadita de condimento italiano seco (mezcla de orégano, albahaca, tomillo)
- ½ cucharadita de sal
- ¼ cucharadita de pimienta negra recién molida
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Para la cobertura de queso:
- 1 taza de queso parmesano rallado (90g)
- 1 taza de queso mozzarella rallado (100g)
- 2 dientes de ajo picados finamente
- 1 cucharadita de perejil fresco picado (opcional, para decorar)
Instrucciones paso a paso
Preparación previa
- Precalienta el horno: Ajusta la temperatura a 190°C (375°F) y coloca la rejilla en la posición central del horno.
- Prepara las pechugas: Si las pechugas son muy gruesas, colócalas entre dos hojas de papel film y aplánalas ligeramente con un mazo de cocina hasta obtener un grosor uniforme de aproximadamente 1,5 cm. Este paso garantiza una cocción pareja.
- Organiza tu estación de empanizado: Prepara tres recipientes amplios y poco profundos. En el primero, coloca la harina. En el segundo, bate los huevos con la leche hasta integrar bien. En el tercero, mezcla el pan rallado con la mitad del queso parmesano (½ taza), el condimento italiano, la sal y la pimienta.
Empanizado y cocción inicial
- Empaniza el pollo: Siguiendo un orden sistemático, pasa cada pechuga primero por la harina, sacudiendo el exceso. Luego, sumerge en la mezcla de huevo, dejando escurrir lo sobrante. Finalmente, presiona suavemente sobre la mezcla de pan rallado, asegurándote de cubrir toda la superficie.
- Dora el pollo: Calienta el aceite de oliva en una sartén grande antiadherente a fuego medio-alto. Cuando esté caliente pero no humeante, coloca las pechugas empanizadas y cocina durante 3-4 minutos por cada lado, hasta que adquieran un color dorado atractivo. No es necesario cocinarlas completamente en este paso, ya que terminarán su cocción en el horno.
Terminado al horno
- Transfiere a una fuente: Coloca las pechugas doradas en una fuente para horno ligeramente engrasada, dejando un pequeño espacio entre ellas.
- Prepara la cobertura de queso: En un recipiente mediano, mezcla la mozzarella rallada con el parmesano restante (½ taza) y el ajo picado. Esta combinación aporta tanto el sabor intenso del parmesano como la textura elástica característica de la mozzarella.
- Añade la cobertura: Distribuye generosamente la mezcla de quesos sobre cada pechuga, cubriendo toda la superficie.
- Hornea hasta completar: Lleva al horno precalentado y hornea durante 20-25 minutos, o hasta que el queso esté burbujeante y ligeramente dorado, y el pollo alcance una temperatura interna de 74°C (165°F). Puedes verificar esto introduciendo un termómetro de cocina en la parte más gruesa de la pechuga.
Sugerencias para servir
Este pollo parmesano es increíblemente versátil y puede presentarse de diversas formas:
- Clásica italiana: Sírvelo sobre un lecho de pasta al dente con salsa marinara casera y espolvorea con perejil fresco picado.
- Estilo Longhorn: Acompáñalo con una guarnición de puré de patatas cremoso y vegetales asados como calabacín, pimiento rojo y berenjena.
- Ligera y fresca: Colócalo junto a una ensalada mediterránea con lechuga romana, tomates cherry, pepino, aceitunas negras y aderezo de vinagreta balsámica.
- Versión sándwich: Corta el pollo en tiras y colócalo dentro de un pan ciabatta tostado con hojas de rúcula y rodajas de tomate fresco para un almuerzo sustancioso.
Variaciones de la receta
Esta receta base permite muchas adaptaciones creativas:
Pollo parmesano con toque picante
Añade ¼ de cucharadita de hojuelas de pimiento rojo triturado a la mezcla de pan rallado y una cucharada de salsa picante tipo Sriracha a la mezcla de quesos para darle un toque de calor que contrasta maravillosamente con la cremosidad del queso.
Versión mediterránea
Incorpora 2 cucharadas de aceitunas negras picadas y 1 cucharada de alcaparras escurridas a la mezcla de quesos. Añade también la ralladura de un limón para aportar frescura cítrica al conjunto.
Alternativa más ligera
Utiliza yogur griego mezclado con un poco de mostaza Dijon en lugar del huevo para el empanizado. Hornea directamente el pollo empanizado sin dorarlo previamente, rociándolo con un poco de aceite en spray para ayudar a que se dore.
Opción sin gluten
Sustituye la harina de trigo por harina de arroz o de almendras y el pan rallado tradicional por pan rallado sin gluten o copos de maíz triturados. El resultado será igualmente crujiente y delicioso.
Consejos para preparar con anticipación
Este plato se presta perfectamente para la preparación parcial anticipada:
- Empanizado previo: Puedes empanar las pechugas hasta con 12 horas de antelación. Colócalas en una bandeja cubierta con papel film en el refrigerador. El reposo ayudará a que el empanado se adhiera mejor al pollo.
- Conservación de sobras: Las sobras se mantienen perfectamente hasta 3 días en el refrigerador en un recipiente hermético. Para recalentar, utiliza el horno a 150°C durante 15 minutos para mantener la textura crujiente.
- Congelación: El pollo empanizado (antes de añadir el queso) puede congelarse hasta por 1 mes. Envuelve cada pieza individualmente en papel film y luego en papel aluminio. Para cocinar, descongela en el refrigerador durante la noche y continúa con los pasos de dorado y horneado.
- Preparación del queso: La mezcla de quesos puede prepararse con antelación y conservarse en el refrigerador hasta por 3 días.
Notas importantes
- El secreto para un empanizado perfecto está en presionar firmemente el pan rallado sobre el pollo húmedo con los dedos, asegurando una cobertura completa y uniforme.
- Si el queso comienza a dorarse demasiado antes de que el pollo esté completamente cocido, cubre la fuente ligeramente con papel aluminio durante los últimos minutos de horneado.
- Para un toque de frescura adicional, puedes añadir 1 cucharada de albahaca fresca picada a la mezcla de quesos justo antes de colocarla sobre el pollo.
- La temperatura interna de seguridad para el pollo es de 74°C (165°F). Un termómetro de cocina es la mejor manera de asegurar una cocción perfecta sin resecar la carne.

Preguntas frecuentes
¿Puedo utilizar pechugas de pollo con hueso?
Es posible, pero necesitarás ajustar el tiempo de cocción. Las pechugas con hueso requieren aproximadamente 10-15 minutos adicionales en el horno. Asegúrate de verificar la temperatura interna antes de servir.
¿Qué puedo usar si no tengo condimento italiano?
Puedes crear tu propia mezcla combinando partes iguales de orégano seco, albahaca, tomillo y una pizca de ajo en polvo. Esta mezcla casera funciona perfectamente como sustituto.
Mi empanizado tiende a desprenderse durante la cocción, ¿cómo puedo evitarlo?
Asegúrate de seguir estrictamente el orden: harina, huevo y luego pan rallado. Además, deja reposar el pollo empanizado en el refrigerador durante 20-30 minutos antes de dorarlo. Esto ayuda a que el empanizado se adhiera mejor.
¿Puedo omitir el paso de dorar en sartén y cocinar todo directamente en el horno?
Aunque es posible, el dorado previo en sartén crea una capa exterior más crujiente y un color más atractivo. Si decides omitir este paso, rocía las pechugas empanizadas con un poco de aceite de oliva y hornea a 200°C (400°F) durante 25-30 minutos antes de añadir el queso.
¿Qué otros quesos puedo utilizar si no tengo mozzarella?
El provolone o el queso Monterey Jack son excelentes sustitutos que ofrecen una textura fundente similar. Incluso el queso Gouda suave funcionaría bien en esta receta.
¿Cómo puedo saber si el pollo está completamente cocido sin un termómetro?
Corta la parte más gruesa de una pechuga. El pollo correctamente cocido debe tener un color blanco uniforme, sin partes rosadas, y los jugos que salen deben ser claros, nunca rosados.
PrintPollo Parmesano Estilo Longhorn Steakhouse: Un Clásico Americano con Toque Italiano
La primera vez que probé este pollo parmesano en Longhorn Steakhouse, quedé absolutamente fascinado por la combinación perfecta de texturas y sabores. Aquella experiencia me llevó a experimentar en casa hasta conseguir recrear este plato emblemático. Durante años, he perfeccionado esta receta hasta lograr esa capa exterior crujiente y dorada, coronada con una irresistible mezcla de quesos derretidos que se estira al cortar el pollo.
En nuestra familia, este platillo se ha convertido en una tradición para las cenas de los viernes, cuando queremos algo especial pero sin complicaciones excesivas. Incluso mis hijos, habitualmente reacios a probar nuevos platos, esperan con ansias el día del “pollo con queso crujiente”, como ellos lo llaman. A través de esta receta, espero traer a tu hogar un pedacito de esa magia culinaria que combina lo mejor de la cocina americana con los sabores tradicionales italianos.
- Prep Time: 20 minutos
- Cook Time: 30 minutos
- Total Time: 50 minutos
- Yield: 4 porciones 1x
- Category: Plato Principal
- Method: Horneado
- Cuisine: Americana e Italiana
Ingredients
Para el pollo:
- 4 pechugas de pollo deshuesadas y sin piel (aproximadamente 150-180g cada una)
- ½ taza de harina de trigo común (60g)
- 2 huevos grandes
- ¼ taza de leche (60ml)
- 1 taza de pan rallado estilo italiano (100g)
- 1 cucharadita de condimento italiano seco (mezcla de orégano, albahaca, tomillo)
- ½ cucharadita de sal
- ¼ cucharadita de pimienta negra recién molida
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Para la cobertura de queso:
- 1 taza de queso parmesano rallado (90g)
- 1 taza de queso mozzarella rallado (100g)
- 2 dientes de ajo picados finamente
- 1 cucharadita de perejil fresco picado (opcional, para decorar)
Instructions
Preparación previa
- Precalienta el horno: Ajusta la temperatura a 190°C (375°F) y coloca la rejilla en la posición central del horno.
- Prepara las pechugas: Si las pechugas son muy gruesas, colócalas entre dos hojas de papel film y aplánalas ligeramente con un mazo de cocina hasta obtener un grosor uniforme de aproximadamente 1,5 cm. Este paso garantiza una cocción pareja.
- Organiza tu estación de empanizado: Prepara tres recipientes amplios y poco profundos. En el primero, coloca la harina. En el segundo, bate los huevos con la leche hasta integrar bien. En el tercero, mezcla el pan rallado con la mitad del queso parmesano (½ taza), el condimento italiano, la sal y la pimienta.
Empanizado y cocción inicial
- Empaniza el pollo: Siguiendo un orden sistemático, pasa cada pechuga primero por la harina, sacudiendo el exceso. Luego, sumerge en la mezcla de huevo, dejando escurrir lo sobrante. Finalmente, presiona suavemente sobre la mezcla de pan rallado, asegurándote de cubrir toda la superficie.
- Dora el pollo: Calienta el aceite de oliva en una sartén grande antiadherente a fuego medio-alto. Cuando esté caliente pero no humeante, coloca las pechugas empanizadas y cocina durante 3-4 minutos por cada lado, hasta que adquieran un color dorado atractivo. No es necesario cocinarlas completamente en este paso, ya que terminarán su cocción en el horno.
Terminado al horno
- Transfiere a una fuente: Coloca las pechugas doradas en una fuente para horno ligeramente engrasada, dejando un pequeño espacio entre ellas.
- Prepara la cobertura de queso: En un recipiente mediano, mezcla la mozzarella rallada con el parmesano restante (½ taza) y el ajo picado. Esta combinación aporta tanto el sabor intenso del parmesano como la textura elástica característica de la mozzarella.
- Añade la cobertura: Distribuye generosamente la mezcla de quesos sobre cada pechuga, cubriendo toda la superficie.
- Hornea hasta completar: Lleva al horno precalentado y hornea durante 20-25 minutos, o hasta que el queso esté burbujeante y ligeramente dorado, y el pollo alcance una temperatura interna de 74°C (165°F). Puedes verificar esto introduciendo un termómetro de cocina en la parte más gruesa de la pechuga.
Notes
- El secreto para un empanizado perfecto está en presionar firmemente el pan rallado sobre el pollo húmedo con los dedos, asegurando una cobertura completa y uniforme.
- Si el queso comienza a dorarse demasiado antes de que el pollo esté completamente cocido, cubre la fuente ligeramente con papel aluminio durante los últimos minutos de horneado.
- Para un toque de frescura adicional, puedes añadir 1 cucharada de albahaca fresca picada a la mezcla de quesos justo antes de colocarla sobre el pollo.
- La temperatura interna de seguridad para el pollo es de 74°C (165°F). Un termómetro de cocina es la mejor manera de asegurar una cocción perfecta sin resecar la carne.
Nutrition
- Serving Size: 1 pechuga (~180g)
- Calories: 520
- Sugar: 1.8g
- Sodium: 720mg
- Fat: 28g
- Saturated Fat: 9.5g
- Unsaturated Fat: 15g
- Trans Fat: 0.3g
- Carbohydrates: 20g
- Fiber: 1.2g
- Protein: 45g
- Cholesterol: 140mg