Todo empezó una tarde fría cuando encontré una bolsa de arándanos olvidada en el refrigerador y unas naranjas que me miraban con cara de “úsanos ya”. No tenía ganas de cocinar algo complicado, pero sí algo que gritara “comfort food con onda gourmet”. De esa inspiración accidental nació este platillo: muslos de pollo doraditos al sartén y horneados con una salsa brillante, dulce, ácida y totalmente adictiva de arándanos frescos, jugo de naranja, miel y un toquecito de mostaza. ¿El resultado? Una cena con sabor a fiesta que no da nada de trabajo. Hasta mi pareja, que siempre desconfía de la fruta en comidas saladas, limpió el plato con pan.
Por qué vas a amar esta receta
- Todo se cocina en una sola sartén apta para horno: menos trastes, más tiempo para ti.
- El contraste de sabores es glorioso: lo dulce, lo ácido, lo salado y ese toquecito de romero… wow.
- Se ve impresionante sin esfuerzo: como para subirla a Instagram sin filtro.
- Está lista en 40 minutos, y 30 de esos los hace el horno.
- Es súper versátil: puedes cambiar la proteína, ajustar el dulzor, hacerlo más picante o más cítrico.
- Funciona igual de bien para una cena romántica como para impresionar a la suegra.
- Las sobras, si es que quedan, mejoran al día siguiente.
- Congela y recalienta bien, así que es ideal para cocinar por adelantado.
Ingredientes esenciales
Para el pollo:
- 4 muslos de pollo, con hueso y piel
- Sal y pimienta al gusto
- 1 cucharada de aceite de oliva
Para la salsa:
- 1 taza de arándanos frescos (puedes usar congelados si no hay otra opción)
- 1 taza de jugo de naranja (recién exprimido si puedes)
- Ralladura de 1 naranja
- 1/4 taza de miel o jarabe de maple
- 2 cucharadas de salsa de soya
- 1 cucharada de mostaza Dijon
- 1 cucharadita de romero fresco picado (más para decorar)
- 1 cucharada de maicena (opcional, para espesar la salsa)
Para acompañar:
- Arroz blanco o arroz salvaje
- Puré de papa cremoso
- Verduras asadas (brócoli, zanahorias, coles de Bruselas)
- Pan crujiente para absorber la salsa (muy recomendado)
Receta paso a paso
Preparación :
- Precalienta el horno a 200°C (400°F).
- Sazona los muslos de pollo con sal y pimienta por ambos lados.
- En una sartén grande apta para horno, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto.
Sellado del pollo :
- Coloca los muslos con la piel hacia abajo y dóralos sin moverlos durante 5-7 minutos, hasta que estén bien dorados.
- Dales la vuelta y cocínalos 3-4 minutos más. No importa si aún están crudos por dentro, se terminarán en el horno. Retira momentáneamente del fuego.
Preparar la salsa (mientras sellas el pollo):
- En una ollita, mezcla los arándanos, jugo y ralladura de naranja, miel o maple, salsa de soya, mostaza y romero.
- Cocina a fuego medio hasta que los arándanos revienten y la salsa espese un poco (unos 5-7 minutos).
- Si deseas una salsa más espesa, disuelve la maicena en una cucharada de agua fría y agrégala al final.
Horneado :
- Vierte la salsa sobre el pollo en la sartén.
- Lleva todo al horno y hornea por 25-30 minutos, hasta que el pollo esté bien cocido (alcanza 75°C o 165°F en el centro).
- Si quieres un acabado más dorado, activa el gratinador durante los últimos 2-3 minutos (¡vigílalo!).
Toque final :
- Decora con un poco más de romero fresco picado.
- Sirve caliente con tus acompañamientos favoritos. No olvides una cuchara para esa salsa celestial.
Cómo servirlo
- Sobre arroz de coco para un giro tropical.
- Con puré de papas cremoso y judías verdes al vapor para una cena clásica.
- En rebanadas finas sobre una ensalada de hojas verdes, nueces y queso de cabra.
- Con couscous o quinoa para una opción más ligera y moderna.
- Como relleno de un sándwich gourmet con pan de masa madre y rúcula.
- Acompañado de una copa de vino blanco seco o un espumoso fresco.
Variaciones sabrosas
- Versión picante: Añade un poco de chile en hojuelas a la salsa.
- Con mango y arándanos: Sustituye parte del jugo de naranja por jugo de mango.
- Veggie style: Usa tofu firme dorado en lugar de pollo, ¡queda espectacular!
- Con pollo deshuesado: Usa pechugas o muslos sin hueso para una cocción más rápida.
- Con mermelada de naranja: Si no tienes jugo fresco, diluye mermelada de naranja en agua caliente.
- Sabor navideño: Añade una pizca de canela y clavo a la salsa para un toque festivo.
Tips para preparar con anticipación y guardar
- Puedes preparar la salsa hasta 3 días antes y guardarla en el refrigerador.
- El pollo puede marinarse unas horas con sal y jugo de naranja para más sabor.
- Guarda las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador hasta 4 días.
- Recalienta en sartén a fuego bajo o en microondas, añadiendo una cucharada de agua para suavizar la salsa.
- También puedes congelar el plato ya cocido hasta por 2 meses.
Preguntas frecuentes
¿Puedo usar pechugas en lugar de muslos?
Sí, pero ten en cuenta que las pechugas se cocinan más rápido y pueden secarse. Usa un termómetro y retíralas del horno apenas lleguen a 75°C.
¿Qué pasa si no tengo arándanos frescos?
Puedes usar congelados directamente sin descongelar. También puedes usar secos, pero reduce la miel o maple ya que los secos suelen venir endulzados.
¿La salsa quedó muy líquida?
Deja hervir un par de minutos más o agrega la mezcla de maicena con agua para espesar. También puedes reducirla en la estufa tras hornear.
¿Se puede hacer todo en sartén sin horno?
Sí, puedes cocinar el pollo completamente en sartén a fuego medio-bajo con tapa, aunque no quedará tan dorado. La textura será más estilo estofado.
¿Puedo duplicar la receta para más personas?
¡Claro! Usa una fuente de horno más grande o dos sartenes. Solo asegúrate de no apilar el pollo para que se cocine parejo.
¿Quedará muy dulce?
La salsa tiene un buen balance, pero si prefieres menos dulzor, reduce un poco la miel o maple y aumenta la mostaza o el jugo de limón.