Rápido resumen
Este pan salado se elabora con calabacín rallado, queso fundente y una masa simple que no requiere amasado prolongado. Es perfecto para aprovechar calabacines de temporada y se puede servir tanto caliente como a temperatura ambiente. Además, es una excelente forma de incluir verduras en la alimentación diaria sin esfuerzo.
Desglose de ingredientes
- 2 huevos
- 120 ml de leche
- 60 ml de aceite de oliva suave
- 200 g de calabacín rallado (bien escurrido)
- 100 g de queso rallado (cheddar, mozzarella o mezcla)
- 200 g de harina de trigo
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- ½ cucharadita de bicarbonato de sodio
- ½ cucharadita de sal
- Pimienta negra al gusto
- Orégano seco o tomillo (opcional)
Receta paso a paso
- Precalienta el horno:
Enciende el horno a 180 °C y engrasa un molde para pan o cúbrelo con papel vegetal. - Prepara el calabacín:
Ralla el calabacín y colócalo en un colador. Añade una pizca de sal, mezcla y deja reposar 10 minutos. Luego, presiona con una cuchara o paño para eliminar el exceso de agua. - Mezcla los ingredientes húmedos:
En un bol, bate los huevos con la leche y el aceite de oliva. Añade el calabacín escurrido y mezcla bien. - Agrega los secos y el queso:
Incorpora la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato, la sal y las especias. Mezcla hasta obtener una masa homogénea. Añade el queso rallado y remueve para integrar. - Hornea el pan:
Vierte la mezcla en el molde y alisa la superficie. Si quieres, espolvorea un poco más de queso por encima. Hornea durante 40–45 minutos o hasta que esté dorado y al insertar un palillo, salga limpio. - Deja enfriar y sirve:
Espera 10 minutos antes de desmoldar. Luego, colócalo sobre una rejilla para que enfríe completamente o sirve tibio.
Errores a evitar
- No escurrir el calabacín: El exceso de agua puede afectar la textura y la cocción.
- Sobremezclar la masa: Puede volver el pan más denso. Mezcla solo lo justo.
- Usar quesos muy grasos o húmedos: Mejor optar por quesos semi-curados o bien rallados.
¿Por qué te encantará este pan?
Porque es fácil de preparar, muy sabroso y perfecto para acompañar sopas, ensaladas o simplemente para disfrutarlo solo. El calabacín le da una humedad natural y el queso un toque dorado y fundente que lo hace irresistible. Además, es una excelente forma de incluir vegetales de forma atractiva.
Consejos para personalizar tu receta
- Añade cebollino, ajo en polvo o pimentón dulce para variar el sabor.
- Sustituye parte de la harina por integral para un toque más rústico.
- Hazlo en formato muffins para una opción de snack o lunchbox.
Resumen
El pan de calabacín con queso es una receta salada deliciosa y versátil. Perfecto para aprovechar calabacines frescos y sorprender con un pan casero distinto, lleno de sabor y textura. ¡Una delicia sencilla que querrás preparar una y otra vez!