Cocinar las Verduras (7-10 minutos)

1. Comienza calentando el aceite de oliva en una olla grande a fuego medio. Este será el lienzo donde construiremos todos los sabores de nuestra sopa.
2. Añade la cebolla, las zanahorias y el apio cortados en dados. Estos tres ingredientes forman la base aromática clásica conocida como “mirepoix” en la cocina francesa. Cocina estas verduras durante aproximadamente 5-7 minutos, o hasta que empiecen a ablandarse. Buscamos que queden tiernas pero no doradas, ya que queremos preservar sus sabores frescos.
3. Durante este proceso, puedes aprovechar para remover ocasionalmente las verduras, asegurándote de que se cocinen de manera uniforme. Notarás cómo comienzan a liberar su dulzura natural mientras se ablandan.

Añadir los Sabores (2-3 minutos)

1. Una vez que las verduras estén tiernas, es momento de incorporar los sabores que harán que esta sopa destaque. Añade el ajo picado, el comino molido, el tomillo seco y el pimentón ahumado. El ajo aportará profundidad, mientras que el comino añadirá calidez, el tomillo un toque herbáceo y el pimentón ese delicioso sabor ahumado.
2. Mezcla bien todos estos ingredientes y sofríe durante 1-2 minutos adicionales. Este breve período de cocción es crucial, ya que permite que las especias liberen sus aceites esenciales y aromas. Sabrás que están listas cuando el aroma invada tu cocina con una fragancia irresistible.

Combinar Todo (5 minutos)

1. Es hora de unir todos los elementos de nuestra sopa. Vierte los tomates en dados con todo su jugo, que aportarán acidez y dulzura natural al caldo.
2. Añade las lentejas previamente enjuagadas. Este enjuague previo es importante para eliminar cualquier impureza y exceso de almidón que podría enturbiar la sopa.
3. Incorpora el caldo de verduras, que servirá como base líquida donde todos los sabores se fusionarán armoniosamente. Si prefieres una sopa más espesa, puedes usar 5 tazas en lugar de 6.
4. No olvides añadir la hoja de laurel, que aportará un sabor sutil pero distintivo mientras la sopa se cocina a fuego lento.
5. Aumenta el fuego para llevar todo a ebullición. Este paso inicial a temperatura alta ayuda a que los sabores comiencen a mezclarse.

Cocinar a Fuego Lento (30-35 minutos)

1. Una vez que la sopa esté hirviendo, reduce el fuego a bajo. Cubre la olla y deja que hierva a fuego lento durante aproximadamente 30-35 minutos. Este tiempo de cocción lento y constante permite que las lentejas se ablanden perfectamente mientras absorben todos los sabores del caldo.
2. Durante este tiempo, las lentejas pasarán de estar duras a tener una textura tierna pero con cuerpo. Puedes probarlas a los 25 minutos para verificar su progreso. El objetivo es que estén suaves pero no demasiado blandas; queremos que mantengan cierta integridad en cada cucharada.
3. Este es también el momento en que la magia ocurre: los sabores individuales comienzan a fundirse, creando un caldo rico y complejo que es mucho más que la suma de sus partes.

Añadir las Espinacas (2-3 minutos)

1. Cuando las lentejas estén tiernas, retira y desecha la hoja de laurel, que ya ha cumplido su función aromática.
2. Es momento de incorporar las espinacas picadas. Revuelve suavemente para que se integren en la sopa caliente. Las verás transformarse ante tus ojos, pasando de hojas firmes a verduras tiernas perfectamente incorporadas en la sopa.
3. Deja que las espinacas se marchiten durante 2-3 minutos. Este breve tiempo de cocción es suficiente para ablandarlas mientras preserva su color vibrante y valor nutricional.

Sazonar y Servir (3-5 minutos)

1. Ha llegado el momento final: ajustar el sabor. Prueba la sopa y añade sal y pimienta según tu gusto personal. Recuerda que puedes empezar con una cantidad moderada e ir ajustando; siempre es más fácil añadir más que corregir un exceso.
2. Sirve la sopa caliente en cuencos individuales. Una guarnición de perejil fresco picado no solo añade un toque de color, sino también un agradable contraste de frescura a la calidez de la sopa.
3. El toque maestro: coloca gajos de limón al lado de cada porción. Un ligero chorrito de limón fresco justo antes de comer añade un brillo ácido que equilibra la riqueza de las lentejas y eleva toda la experiencia de sabor.