Rápido Resumen
Este fudge está inspirado en la clásica Boston Cream Pie: una base suave con sabor a vainilla, una capa de crema pastelera espesa y una cobertura de ganache de chocolate. Es fácil de preparar y perfecto para presentar en porciones pequeñas, ya sea en fiestas, regalos o simplemente para darte un gusto.
Desglose de ingredientes
Para la base de vainilla:
- 200 g de chocolate blanco
- 200 g de leche condensada
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 sobre de pudín de vainilla instantáneo (opcional, para más sabor y textura)

Para la capa de ganache:
- 120 g de chocolate negro o con leche
- 80 ml de nata (crema para batir)
- 1 cucharada de mantequilla
Receta paso a paso
- Preparar la base: En una olla a fuego bajo, derrite el chocolate blanco junto con la leche condensada y la mantequilla, removiendo constantemente. Añade la vainilla y, si lo usas, el pudín en polvo para darle más cuerpo y sabor. Cocina hasta que la mezcla esté homogénea y espesa.
- Verter en el molde: Forra un molde cuadrado con papel vegetal. Vierte la mezcla de vainilla y alisa la superficie. Lleva al refrigerador mientras preparas la capa de chocolate.
- Hacer la ganache: Calienta la nata en una cacerola pequeña sin dejar que hierva. Retira del fuego y añade el chocolate troceado y la mantequilla. Deja reposar un minuto y luego mezcla hasta obtener una crema brillante.
- Montar el fudge: Vierte la ganache sobre la capa de vainilla ya fría. Alisa con una espátula y refrigera al menos 2–3 horas, o hasta que esté completamente firme.
- Cortar y servir: Desmolda y corta en cuadritos con un cuchillo caliente para obtener bordes limpios. ¡Y a disfrutar!
Errores a evitar
- No dejar enfriar entre capas: Si la base aún está caliente, la ganache se hundirá y no quedará en la superficie.
- No usar chocolate de buena calidad: El sabor del chocolate es clave aquí. Invierte en uno que realmente te guste.
- Sobrecalentar la mezcla: Calienta a fuego bajo y con paciencia, para evitar que el chocolate se queme o se corte.
¿Por qué te encantará este fudge?
Es como comer una tarta Boston Cream sin necesidad de hornear ni montar bizcochos. Tiene una textura cremosa y densa que se deshace en la boca, y el contraste entre la vainilla dulce y el chocolate intenso es simplemente perfecto. Además, se conserva bien y se ve espectacular en una bandeja de dulces.

Consejos para personalizar tu receta
- Agrega galletas troceadas: Para una base más crujiente y textura extra.
- Usa diferentes tipos de chocolate: Prueba con chocolate con leche, semiamargo o incluso blanco en la capa superior.
- Decora con chispas o virutas: Para darle un toque festivo y más atractivo.
Resumen
El fudge de tarta Boston Cream es un homenaje delicioso a uno de los postres clásicos más queridos, convertido en un bocado práctico, fácil de preparar y absolutamente adictivo. Ideal para sorprender con algo original, pero con ese toque casero que encanta a todos. ¡Una receta que se convertirá en favorita!