Ensalada de Espinacas con Fresas

La primera vez que probé esta ensalada fue en una reunión familiar durante la primavera. Mi tía, conocida por sus creaciones culinarias innovadoras, la sirvió como acompañamiento para un almuerzo al aire libre. Quedé completamente cautivada por la combinación de sabores: la dulzura natural de las fresas maduras contrastando con el ligero amargor de las espinacas frescas, todo realzado por el toque salado del queso feta y la crujiente textura de las nueces pecanas tostadas. Desde ese momento, esta ensalada se convirtió en una de mis recetas imprescindibles durante la temporada de fresas. Lo que más me fascina es cómo un plato tan sencillo puede transformar cualquier comida ordinaria en una experiencia gastronómica memorable.

¿Por qué te encantará esta receta?

Esta Ensalada de Espinacas con Fresas destaca por múltiples razones que la convierten en un plato irresistible. En primer lugar, la combinación de colores vibrantes —el verde intenso de las espinacas, el rojo brillante de las fresas y el azul profundo de los arándanos— crea una presentación visualmente espectacular que despierta el apetito incluso antes del primer bocado. Además, la diversidad de texturas resulta fascinante: desde la suavidad de las frutas hasta el crujido de las nueces tostadas.

Por otra parte, es extraordinariamente versátil y se adapta perfectamente a cualquier ocasión, ya sea una cena informal entre semana o una celebración elegante. Su preparación requiere apenas 15 minutos sin necesidad de cocinar, convirtiéndola en una opción perfecta para los días calurosos o cuando el tiempo apremia. Desde el punto de vista nutricional, esta ensalada representa un festín de antioxidantes, vitaminas y minerales esenciales, demostrando que lo saludable puede ser también increíblemente delicioso.

Ingredientes

Para el glaseado balsámico:

  • 1 taza de vinagre balsámico
  • ¼ taza de miel o azúcar moreno

Para la ensalada:

  • 280 g (10 oz) de espinacas baby frescas
  • 3 tazas de fresas limpias, sin tallo y cortadas en rodajas
  • 1 taza de arándanos
  • ⅓ taza de queso feta desmenuzado
  • 1 taza de nueces pecanas tostadas (algunas picadas)

Instrucciones paso a paso

Preparación del glaseado balsámico

  1. En una cacerola pequeña, calienta el vinagre balsámico y la miel a fuego medio.
  2. Lleva la mezcla a ebullición suave, reduce el fuego a mínimo y cocina, removiendo ocasionalmente, hasta que espese y se reduzca aproximadamente a la mitad (alrededor de 10 minutos).
  3. Retira del fuego y vierte el glaseado balsámico en un recipiente resistente al calor para que se enfríe. Ten en cuenta que el glaseado se espesará aún más mientras se enfría.
  4. Comprueba la consistencia: debe ser lo suficientemente espeso para cubrir el dorso de una cuchara, pero no excesivamente denso.

Preparación de la ensalada

  1. Lava cuidadosamente las espinacas baby y sécalas bien con papel absorbente o en una centrifugadora de ensaladas.
  2. Limpia las fresas, retira los tallos y córtalas en rodajas uniformes.
  3. Lava los arándanos y déjalos secar.
  4. Si las nueces pecanas no están tostadas, calienta un sartén a fuego medio y tuesta las nueces durante 5-7 minutos, removiendo frecuentemente para evitar que se quemen. Deja enfriar y pica aproximadamente la mitad.
  5. En un recipiente grande, combina las espinacas, las fresas en rodajas, los arándanos y el queso feta desmenuzado. Mezcla suavemente para integrar todos los ingredientes.

Montaje y presentación

  1. Divide la ensalada en platos individuales o fuentes de servir.
  2. Espolvorea las nueces pecanas tostadas (enteras y picadas) sobre cada porción.
  3. Finaliza con un ligero chorrito de glaseado balsámico sobre cada plato justo antes de servir.

Sugerencias para servir

Esta ensalada versátil brilla como guarnición junto a platos principales como pollo a la parrilla, salmón horneado o incluso una lasaña vegetariana. Sin embargo, también puede transformarse en un plato principal añadiendo proteínas como pollo desmenuzado, camarones salteados o garbanzos asados. Para una comida veraniega informal, sirve esta ensalada con pan crujiente de masa fermentada y un vino blanco seco como Sauvignon Blanc o un rosado fresco.

Durante los meses más cálidos, esta ensalada resulta perfecta para picnics y barbacoas. En este caso, te recomiendo transportar los ingredientes por separado y ensamblar la ensalada en el último momento, llevando el glaseado balsámico en un recipiente aparte para mantener la frescura y textura de todos los componentes.

Variaciones de la receta

Versión con queso de cabra

Sustituye el queso feta por queso de cabra cremoso para una textura más suave y un sabor ligeramente más intenso. Esta variación combina especialmente bien con una pizca adicional de pimienta negra recién molida sobre la ensalada terminada.

Opción con frutos secos variados

Experimenta con diferentes frutos secos como almendras laminadas, nueces de macadamia o pistachos en lugar de las nueces pecanas. Cada alternativa aportará un perfil de sabor y textura único, permitiéndote personalizar la ensalada según tus preferencias.

Versión vegana

Para una opción completamente vegana, omite el queso feta o reemplázalo por tofu firme desmenuzado y marinado brevemente en salsa de soya con un toque de levadura nutricional. Asegúrate también de utilizar miel de agave o azúcar moreno para el glaseado balsámico.

Consejos para preparar con anticipación

Esta ensalada se presta maravillosamente para la preparación parcial anticipada, ahorrándote tiempo en el momento de servir. Puedes preparar el glaseado balsámico con hasta una semana de antelación y conservarlo en un frasco hermético en el refrigerador. Simplemente caliéntalo ligeramente a temperatura ambiente antes de usar si se ha espesado demasiado.

Las nueces pecanas pueden tostarse y almacenarse en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante varios días. Sin embargo, para mantener la máxima frescura y calidad, recomiendo lavar y preparar las espinacas y las frutas el mismo día de servir la ensalada o, como máximo, con un día de anticipación.

Si necesitas transportar esta ensalada para un evento, lleva todos los componentes por separado: las espinacas en un contenedor hermético forrado con papel absorbente para mantener la frescura, las frutas en otro recipiente, y el queso, las nueces y el glaseado en contenedores individuales más pequeños. Ensambla la ensalada justo antes de servir para mantener todas las texturas y sabores en su punto óptimo.

Notas importantes

  • Selecciona siempre fresas maduras pero firmes para obtener el mejor sabor y textura. Las fresas demasiado maduras pueden volverse demasiado blandas en la ensalada.
  • El glaseado balsámico continuará espesando mientras se enfría. Si queda demasiado espeso para rociar fácilmente, diluye con unas gotas de agua tibia y mezcla bien.
  • Para un sabor más intenso en las nueces pecanas, puedes añadir una pizca de sal o una cucharada de azúcar al tostarlas.
  • Las espinacas baby son ideales para esta receta por su sabor suave y textura tierna. Si utilizas espinacas regulares, considera recortarlas en trozos más pequeños.
  • Para una presentación más elegante, reserva algunas fresas enteras y colócalas estratégicamente sobre la ensalada montada.

Preguntas frecuentes

¿Puedo preparar esta ensalada el día anterior?

Aunque es mejor disfrutar esta ensalada recién preparada, puedes preparar los componentes por separado con anticipación. Guarda las espinacas lavadas y secas en un recipiente hermético con papel absorbente, corta las fresas poco antes de servir y mantén el glaseado, las nueces y el queso por separado hasta el momento de ensamblar.

¿Qué otras frutas puedo utilizar en esta ensalada?

Esta receta funciona maravillosamente con otras frutas como melocotones o nectarinas en rodajas, frambuesas, mandarinas o incluso peras maduras durante el otoño. Elige frutas de temporada para obtener el mejor sabor y valor nutricional.

¿Puedo usar vinagreta embotellada en lugar de hacer el glaseado balsámico?

Sí, aunque el glaseado casero aporta un sabor incomparable, puedes sustituirlo por una vinagreta balsámica de calidad para ahorrar tiempo. Busca una opción cremosa y ligeramente dulce que complemente los sabores de la ensalada.

¿Cómo puedo convertir esta ensalada en un plato principal?

Para transformar esta ensalada en una comida completa, añade proteínas como pollo a la parrilla, salmón ahumado, camarones cocidos o, para opciones vegetarianas, garbanzos asados o quinoa cocida. Esto incrementará el valor nutricional y la saciedad del plato sin comprometer su delicioso sabor.

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Ensalada de Espinacas con Fresas

La primera vez que probé esta ensalada fue en una reunión familiar durante la primavera. Mi tía, conocida por sus creaciones culinarias innovadoras, la sirvió como acompañamiento para un almuerzo al aire libre. Quedé completamente cautivada por la combinación de sabores: la dulzura natural de las fresas maduras contrastando con el ligero amargor de las espinacas frescas, todo realzado por el toque salado del queso feta y la crujiente textura de las nueces pecanas tostadas. Desde ese momento, esta ensalada se convirtió en una de mis recetas imprescindibles durante la temporada de fresas. Lo que más me fascina es cómo un plato tan sencillo puede transformar cualquier comida ordinaria en una experiencia gastronómica memorable.

  • Author: Maria
  • Prep Time: 15 minutos
  • Total Time: 15 minutos
  • Yield: 6 porciones 1x
  • Category: Ensalada
  • Method: Sin cocción
  • Cuisine: Mediterránea

Ingredients

Scale

Para el glaseado balsámico:

  • 1 taza de vinagre balsámico
  • ¼ taza de miel o azúcar moreno

Para la ensalada:

 

  • 280 g (10 oz) de espinacas baby frescas
  • 3 tazas de fresas limpias, sin tallo y cortadas en rodajas
  • 1 taza de arándanos
  • taza de queso feta desmenuzado
  • 1 taza de nueces pecanas tostadas (algunas picadas)

Instructions

Preparación del glaseado balsámico

  1. En una cacerola pequeña, calienta el vinagre balsámico y la miel a fuego medio.
  2. Lleva la mezcla a ebullición suave, reduce el fuego a mínimo y cocina, removiendo ocasionalmente, hasta que espese y se reduzca aproximadamente a la mitad (alrededor de 10 minutos).
  3. Retira del fuego y vierte el glaseado balsámico en un recipiente resistente al calor para que se enfríe. Ten en cuenta que el glaseado se espesará aún más mientras se enfría.
  4. Comprueba la consistencia: debe ser lo suficientemente espeso para cubrir el dorso de una cuchara, pero no excesivamente denso.

Preparación de la ensalada

  1. Lava cuidadosamente las espinacas baby y sécalas bien con papel absorbente o en una centrifugadora de ensaladas.
  2. Limpia las fresas, retira los tallos y córtalas en rodajas uniformes.
  3. Lava los arándanos y déjalos secar.
  4. Si las nueces pecanas no están tostadas, calienta un sartén a fuego medio y tuesta las nueces durante 5-7 minutos, removiendo frecuentemente para evitar que se quemen. Deja enfriar y pica aproximadamente la mitad.
  5. En un recipiente grande, combina las espinacas, las fresas en rodajas, los arándanos y el queso feta desmenuzado. Mezcla suavemente para integrar todos los ingredientes.

Montaje y presentación

 

  1. Divide la ensalada en platos individuales o fuentes de servir.
  2. Espolvorea las nueces pecanas tostadas (enteras y picadas) sobre cada porción.
  3. Finaliza con un ligero chorrito de glaseado balsámico sobre cada plato justo antes de servir.

Notes

  • Selecciona siempre fresas maduras pero firmes para obtener el mejor sabor y textura. Las fresas demasiado maduras pueden volverse demasiado blandas en la ensalada.
  • El glaseado balsámico continuará espesando mientras se enfría. Si queda demasiado espeso para rociar fácilmente, diluye con unas gotas de agua tibia y mezcla bien.
  • Para un sabor más intenso en las nueces pecanas, puedes añadir una pizca de sal o una cucharada de azúcar al tostarlas.
  • Las espinacas baby son ideales para esta receta por su sabor suave y textura tierna. Si utilizas espinacas regulares, considera recortarlas en trozos más pequeños.

 

  • Para una presentación más elegante, reserva algunas fresas enteras y colócalas estratégicamente sobre la ensalada montada.

Nutrition

  • Serving Size: 1 porción
  • Calories: 264 kcal
  • Sugar: 18g
  • Sodium: 120mg
  • Fat: 16g
  • Saturated Fat: 3g
  • Unsaturated Fat: 12g
  • Trans Fat: 0g
  • Carbohydrates: 26g
  • Fiber: 5g
  • Protein: 5g
  • Cholesterol: 8mg

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