Descubrí esta receta de camarones al ajillo salteados durante una época especialmente caótica de mi vida profesional. Acababa de comenzar un nuevo trabajo que exigía largas jornadas, mientras intentaba mantener una alimentación saludable sin pasar horas en la cocina. Una noche, cansada de los servicios de comida a domicilio, decidí crear algo rápido con los camarones que tenía en el congelador.
Con apenas unos ingredientes básicos de la despensa y menos de 20 minutos disponibles, nació esta versión de camarones salteados que, para mi sorpresa, superaba por mucho cualquier plato similar que hubiera pedido a domicilio. El aroma del ajo y el jengibre inundó mi pequeño apartamento, transportándome momentáneamente a los bulliciosos mercados callejeros de Asia que había visitado años atrás.
Desde entonces, este plato se ha convertido en mi solución favorita para esas noches en que deseo algo realmente delicioso sin complicaciones. Cada vez que lo preparo, recuerdo que a veces las mejores creaciones culinarias nacen de la necesidad y unos pocos ingredientes de calidad.
Author:Maria
Prep Time:5 minutos
Cook Time:10 minutos
Total Time:15 minutos
Yield:3-4 porciones 1x
Cuisine:China
Ingredients
Scale
Para el salteado:
1 cucharada de aceite vegetal
450 gramos de camarones blancos, pelados y desvenados
½ cucharada de jengibre fresco rallado
1 cucharada de ajo picado
1 pimiento rojo mediano, cortado en tiras
1 cucharada de cebollín finamente picado
Cacahuetes triturados (opcional, para servir)
Para la salsa:
2 cucharadas de salsa de soja
1 cucharada de vino Shaoxing (opcional)
2 cucharadas de kétchup
¼ taza de caldo de pollo (o agua)
1 cucharada de maicena
Instructions
Preparación de la salsa:
Mezcla los ingredientes: En un recipiente pequeño, bate todos los ingredientes de la salsa hasta obtener una mezcla homogénea: salsa de soja, vino Shaoxing, kétchup, caldo de pollo (o agua) y maicena.
Integra bien: Asegúrate de que la maicena esté completamente disuelta, sin grumos. La consistencia debe ser uniforme. Reserva esta mezcla para usar posteriormente.
Preparación del salteado:
Calienta el wok o sartén: En un wok grande o sartén amplia, calienta el aceite vegetal a fuego medio-alto hasta que esté bien caliente y comience a formar pequeñas ondulaciones, aproximadamente 1 minuto.
Saltea los camarones: Añade los camarones y cocínalos hasta que cambien de color y se vuelvan rosados por ambos lados, aproximadamente 4-6 minutos. Muévelos constantemente para garantizar una cocción uniforme.
Incorpora aromáticos: Agrega el jengibre rallado y el ajo picado, cocinando hasta que liberen su aroma, aproximadamente 1 minuto. Ten cuidado de no quemar el ajo, ya que puede amargar el plato.
Añade la salsa y las verduras: Vierte la salsa preparada previamente y añade las tiras de pimiento rojo. Mezcla bien todos los ingredientes y cocina hasta que la salsa comience a burbujear y adquiera una consistencia espesa, aproximadamente 2-3 minutos.
Finaliza el plato: Incorpora el cebollín picado, mezclando suavemente para integrarlo sin que pierda su frescura y color vibrante.
Presentación:
Sirve inmediatamente: Transfiere los camarones salteados a un plato de servicio, preferiblemente caliente para mantener la temperatura ideal del plato.
Decora y complementa: Espolvorea cacahuetes triturados por encima para añadir textura y un toque de sabor tostado. Sirve junto a un cuenco de arroz blanco recién hecho, cuya neutralidad resaltará los sabores intensos del salteado.
Notes
Elección de camarones: Para mejores resultados, utiliza camarones medianos o grandes, frescos o previamente congelados pero completamente descongelados. Los camarones más pequeños tienden a cocinarse demasiado rápido y pueden quedar gomosos.
Sustitución del vino Shaoxing: Si no tienes este ingrediente específico, puedes usar jerez seco, vino blanco seco o incluso omitirlo, aunque aporta un sabor único que eleva el plato.
Control del espesor de la salsa: Si prefieres una salsa más ligera, reduce la cantidad de maicena a 2 cucharaditas. Para una salsa más espesa, puedes aumentarla hasta 1½ cucharadas.
Balance de sabores: Antes de servir, prueba la salsa y ajusta según sea necesario: más salsa de soja para intensidad salada, un toque de miel o azúcar para dulzor, o unas gotas de vinagre de arroz para acidez.