Estaba pasando por esa fase en la que llegaba perpetuamente tarde al trabajo (todos hemos estado ahí), y desayunar normalmente significaba una triste barrita de granola devorada en medio del tráfico. Sin embargo, todo cambió cuando mi amiga me presentó la avena nocturna y ¡BAM! – mi vida dio un giro completo. Esta Avena Nocturna con Fresas y Crema es básicamente tu salvación matutina en un frasco. Simplemente mezclas todos los ingredientes la noche anterior y, al despertar, te espera un desayuno cremoso lleno de fresas. Es como si tu yo del pasado le hubiera hecho un gran favor a tu yo de la mañana. Además, sabe a tarta de queso con fresas pero, sorprendentemente, es saludable. ¡Un verdadero triunfo para el desayuno!
Por qué te enamorarás de esta receta
Sin querer presumir, pero esta avena nocturna ha mejorado seriamente mi vida:
- Se prepara en solo 5 minutos la noche anterior – literalmente la he preparado mientras me cepillaba los dientes.
- No requiere cocción. NINGUNA. Es decir, nada de fogones, ni microondas, absolutamente nada.
- ¡Realmente te deja satisfecho! No me muero de hambre a las 10 de la mañana como con esas patéticas barritas de granola.
- La proteína del yogur griego y las semillas de chía mantiene los niveles de energía estables (sin bajones de azúcar a media mañana).
- Son súper portátiles – simplemente agarra y ve si llegas tarde.
- Puedes personalizarlas de mil maneras dependiendo de lo que tengas en tu refrigerador.
- Parece que estás desayunando un postre, pero están cargadas de cosas buenas.
- Mi amiga que “odia la avena” adora estas. Eso dice mucho.

Ingredientes
Para la Base:
- 1/2 taza de avena tradicional (no instantánea, no de corte de acero – la normal)
- 1/2 taza de leche (del tipo que bebas – de vaca, almendra, avena, sin prejuicios)
- 1/4 taza de yogur griego natural (el de grasa completa sabe mejor, pero usa lo que prefieras)
- 1 cucharada de semillas de chía (se hinchan y hacen todo cremoso)
- 1–2 cucharadas de sirope de arce o miel (dependiendo de cuán dulce sea tu paladar)
- 1/4 cucharadita de extracto de vainilla (la auténtica marca la diferencia)
- Pizca de sal (suena raro pero confía en mí, realza el dulzor)
Para la Bondad de Fresas:
- 3/4 taza de fresas frescas, cortadas en dados (las congeladas funcionan en caso de apuro)
- 1 cucharada de mermelada de fresa (opcional, pero añade un golpe de sabor)
Añadidos Opcionales:
- 1 cucharada de queso crema (para ese ambiente de tarta de queso)
- Espolvoreado de galletas graham trituradas (refuerza la sensación de tarta de queso)
- Un pequeño puñado de chips de chocolate blanco (para cuando te sientas especialmente goloso)
- 1 cucharada de almendras laminadas o pistachos picados (para dar crujido)
- Un chorrito extra de crema (para cuando vives la vida sin arrepentimientos)
Instrucciones Paso a Paso
- Encuentra tu recipiente perfecto: Busca un frasco de vidrio con tapa o un recipiente hermético. En lo personal, me encantan los frascos Mason porque tienen ese aire vintage y honestamente, hacen que la avena se vea más bonita (sí, le tomo fotos a mi desayuno, no me juzgues).
- Mezcla los ingredientes base: En tu recipiente elegido, combina la avena, leche, yogur griego, semillas de chía, endulzante, extracto de vainilla y esa pizca mágica de sal. Revuelve bien hasta que no queden grumos y todas las semillas de chía estén distribuidas uniformemente.
- Incorpora las fresas: Después de cortar las fresas en trozos pequeños, añade la mayoría al recipiente. Guarda algunas para decorar encima mañana. Si estás usando la mermelada de fresa, este es el momento de agregarla. Mezcla ligeramente para distribuirla a través de la avena.
- Añade tus extras especiales: Si optas por incluir queso crema, córtalo en cubitos pequeños e incorpóralo a la mezcla. Para las migas de galleta, chips de chocolate o frutos secos, puedes mezclarlos ahora o guardarlos para añadirlos justo antes de comer para mantener su textura.
- Refrigera durante la noche: Coloca la tapa en tu recipiente y refrigera por al menos 6 horas, pero preferiblemente toda la noche. Durante este tiempo, la magia sucede: la avena absorbe el líquido, las semillas de chía se expanden, y todos los sabores se fusionan maravillosamente.
- ¡Disfruta tu creación matutina!: A la mañana siguiente, saca tu avena del refrigerador. Si parece demasiado espesa, añade un poco más de leche. Decora con las fresas restantes y cualquier otro añadido que hayas reservado. ¡Listo para disfrutar!
Sugerencias para Servir
Esta avena nocturna es increíblemente versátil. Aquí tienes algunas ideas para hacerla aún más especial:
- Para un brunch de fin de semana: Sirve en vasos de parfait con capas adicionales de fresas frescas y un toque de crema batida (es fin de semana, te lo mereces).
- Para los días laborables: Llévala en su frasco Mason, directamente de la nevera a tu bolso. Añade las fresas frescas y un puñado de granola justo antes de comer para obtener un contraste crujiente.
- Como merienda post-entrenamiento: Añade una cucharada extra de proteína en polvo a la mezcla base y disfruta después de tu sesión de ejercicios.
- Para los pequeños de casa: Sirve en tazones coloridos con fresas cortadas en formas divertidas por encima. Puedes llamarlo “postre para desayunar” y verás cómo desaparece.
Variaciones de la Receta
La belleza de esta receta radica en su adaptabilidad. Aquí algunas variaciones deliciosas:
Versión Tropical
Sustituye las fresas por mango y piña picados. Añade coco rallado y usa leche de coco para un escape tropical por la mañana.
Opción Chocolate-Fresa
Incorpora 1 cucharada de cacao en polvo a la mezcla base y usa chips de chocolate negro en lugar de chocolate blanco. El contraste con las fresas es simplemente celestial.
Variante Tarta de Queso con Limón y Fresa
Añade la ralladura de medio limón a la mezcla base y aumenta la cantidad de queso crema a 2 cucharadas. Las fresas y el limón forman una combinación refrescante.
Para Amantes del Plátano
Mezcla medio plátano maduro aplastado en la base y coloca el resto en rodajas sobre las fresas. Es como un batido de fresa y plátano en versión avena.
Versión Vegana
Sustituye el yogur griego por yogur de coco o almendra, y usa leche vegetal. Asegúrate de que tu endulzante sea vegano (como el sirope de arce).
Consejos para Preparar con Anticipación
Esta receta ya está diseñada para prepararse con anticipación, pero aquí tienes algunos trucos adicionales:
- Lote semanal: Prepara 5 frascos el domingo por la noche para tener el desayuno listo toda la semana. Mantén las fresas frescas separadas hasta el día de consumo para mayor frescura.
- Estación pre-avena: Crea una pequeña zona en tu refrigerador con frascos vacíos y todos los ingredientes listos para mezclar. Así, preparar tu avena nocturna tomará literalmente 2 minutos antes de irte a dormir.
- Bolsas de ingredientes secos: Prepara bolsitas con los ingredientes secos premezclados (avena, chía, endulzante seco si usas). Por la noche, solo necesitarás añadir los ingredientes húmedos.
- Frutas congeladas: Usa fresas congeladas directamente en la mezcla. Se descongelarán durante la noche y liberarán su jugo, intensificando el sabor a fresa.
Notas
- La textura ideal de esta avena es cremosa pero con cierta consistencia. Si la encuentras demasiado líquida por la mañana, prueba reduciendo ligeramente la cantidad de leche la próxima vez.
- Para obtener el máximo sabor, deja que las fresas se maceren con un poco de azúcar durante 10 minutos antes de añadirlas a la mezcla.
- Aunque puedes consumir esta avena hasta 3 días después de prepararla, el sabor y la textura son óptimos dentro de las primeras 24 horas.
- Si notas que las semillas de chía se agrupan en la mezcla, intenta revolver la avena unos 30 minutos después de haberla preparado, antes de dejarla toda la noche.
- Esta receta es altamente nutritiva: proporciona fibra (avena y fresas), proteínas (yogur griego y chía), ácidos grasos saludables (chía) y antioxidantes (fresas).

Preguntas Frecuentes
¿Puedo calentar esta avena nocturna? ¡Claro! Aunque está diseñada para comerse fría, si prefieres un desayuno caliente, puedes calentarla en el microondas durante 60-90 segundos. Considera añadir un poco más de leche, ya que se espesará al calentarse.
¿Qué tipo de avena funciona mejor? La avena tradicional (rolled oats) es ideal. La avena instantánea tiende a volverse demasiado blanda, mientras que la avena de corte de acero queda muy dura a menos que la cocines previamente.
¿Cuánto tiempo duran en el refrigerador? Se mantienen bien hasta 3 días. Sin embargo, después del primer día, las fresas comenzarán a liberar más jugo, así que la textura cambiará ligeramente. Sigue siendo deliciosa, solo un poco más húmeda.
¿Las semillas de chía son realmente necesarias? Técnicamente no, pero aportan mucho a la receta. Añaden proteína, fibra y ácidos grasos omega-3, además de crear esa textura pudding tan agradable. Si no tienes, puedes omitirlas, pero considera añadir un poco menos de leche.
No me gusta el yogur griego, ¿puedo usar otro? ¡Absolutamente! Cualquier yogur funcionará, aunque el resultado será menos cremoso con yogures más líquidos. También puedes sustituirlo por la misma cantidad de leche o incluso puré de plátano para una versión sin lácteos.
¿Son saludables? Muy saludables. Contienen fibra, proteínas, antioxidantes y pueden adaptarse fácilmente a diversas necesidades dietéticas. Para una versión con menos azúcar, reduce o elimina el endulzante añadido y confía en la dulzura natural de las fresas.
Mi familia no es fanática de las fresas, ¿qué otras frutas puedo usar? ¡Prácticamente cualquiera! Arándanos, frambuesas, melocotones, manzanas salteadas con canela, plátanos… todas funcionan maravillosamente. Solo asegúrate de que las frutas más duras (como las manzanas) estén cortadas en trozos pequeños.
¿Puedo preparar esto sin refrigerador? No es ideal, pero en situaciones de emergencia (como acampadas), puedes prepararlo con 3-4 horas de anticipación a temperatura ambiente, siempre que no haga demasiado calor. Considera usar leche en polvo reconstituida en este caso para evitar problemas.
PrintAvena Nocturna con Fresas y Crema
Estaba pasando por esa fase en la que llegaba perpetuamente tarde al trabajo (todos hemos estado ahí), y desayunar normalmente significaba una triste barrita de granola devorada en medio del tráfico. Sin embargo, todo cambió cuando mi amiga me presentó la avena nocturna y ¡BAM! – mi vida dio un giro completo. Esta Avena Nocturna con Fresas y Crema es básicamente tu salvación matutina en un frasco. Simplemente mezclas todos los ingredientes la noche anterior y, al despertar, te espera un desayuno cremoso lleno de fresas. Es como si tu yo del pasado le hubiera hecho un gran favor a tu yo de la mañana. Además, sabe a tarta de queso con fresas pero, sorprendentemente, es saludable. ¡Un verdadero triunfo para el desayuno!
- Prep Time: 5 minutos
- Total Time: 8 horas (incluyendo refrigeración nocturna)
- Yield: 1 porción 1x
- Category: Desayuno
- Method: Sin cocción, Refrigerado
- Cuisine: Internacional, Saludable
Ingredients
Para la Base:
- 1/2 taza de avena tradicional (no instantánea, no de corte de acero – la normal)
- 1/2 taza de leche (del tipo que bebas – de vaca, almendra, avena, sin prejuicios)
- 1/4 taza de yogur griego natural (el de grasa completa sabe mejor, pero usa lo que prefieras)
- 1 cucharada de semillas de chía (se hinchan y hacen todo cremoso)
- 1–2 cucharadas de sirope de arce o miel (dependiendo de cuán dulce sea tu paladar)
- 1/4 cucharadita de extracto de vainilla (la auténtica marca la diferencia)
- Pizca de sal (suena raro pero confía en mí, realza el dulzor)
Para la Bondad de Fresas:
- 3/4 taza de fresas frescas, cortadas en dados (las congeladas funcionan en caso de apuro)
- 1 cucharada de mermelada de fresa (opcional, pero añade un golpe de sabor)
Añadidos Opcionales:
- 1 cucharada de queso crema (para ese ambiente de tarta de queso)
- Espolvoreado de galletas graham trituradas (refuerza la sensación de tarta de queso)
- Un pequeño puñado de chips de chocolate blanco (para cuando te sientas especialmente goloso)
- 1 cucharada de almendras laminadas o pistachos picados (para dar crujido)
- Un chorrito extra de crema (para cuando vives la vida sin arrepentimientos)
Instructions
- Encuentra tu recipiente perfecto: Busca un frasco de vidrio con tapa o un recipiente hermético. En lo personal, me encantan los frascos Mason porque tienen ese aire vintage y honestamente, hacen que la avena se vea más bonita (sí, le tomo fotos a mi desayuno, no me juzgues).
- Mezcla los ingredientes base: En tu recipiente elegido, combina la avena, leche, yogur griego, semillas de chía, endulzante, extracto de vainilla y esa pizca mágica de sal. Revuelve bien hasta que no queden grumos y todas las semillas de chía estén distribuidas uniformemente.
- Incorpora las fresas: Después de cortar las fresas en trozos pequeños, añade la mayoría al recipiente. Guarda algunas para decorar encima mañana. Si estás usando la mermelada de fresa, este es el momento de agregarla. Mezcla ligeramente para distribuirla a través de la avena.
- Añade tus extras especiales: Si optas por incluir queso crema, córtalo en cubitos pequeños e incorpóralo a la mezcla. Para las migas de galleta, chips de chocolate o frutos secos, puedes mezclarlos ahora o guardarlos para añadirlos justo antes de comer para mantener su textura.
- Refrigera durante la noche: Coloca la tapa en tu recipiente y refrigera por al menos 6 horas, pero preferiblemente toda la noche. Durante este tiempo, la magia sucede: la avena absorbe el líquido, las semillas de chía se expanden, y todos los sabores se fusionan maravillosamente.
- ¡Disfruta tu creación matutina!: A la mañana siguiente, saca tu avena del refrigerador. Si parece demasiado espesa, añade un poco más de leche. Decora con las fresas restantes y cualquier otro añadido que hayas reservado. ¡Listo para disfrutar!
Notes
- La textura ideal de esta avena es cremosa pero con cierta consistencia. Si la encuentras demasiado líquida por la mañana, prueba reduciendo ligeramente la cantidad de leche la próxima vez.
- Para obtener el máximo sabor, deja que las fresas se maceren con un poco de azúcar durante 10 minutos antes de añadirlas a la mezcla.
- Aunque puedes consumir esta avena hasta 3 días después de prepararla, el sabor y la textura son óptimos dentro de las primeras 24 horas.
- Si notas que las semillas de chía se agrupan en la mezcla, intenta revolver la avena unos 30 minutos después de haberla preparado, antes de dejarla toda la noche.
- Esta receta es altamente nutritiva: proporciona fibra (avena y fresas), proteínas (yogur griego y chía), ácidos grasos saludables (chía) y antioxidantes (fresas).
Nutrition
- Serving Size: 1 frasco (aproximadamente 350g)
- Calories: 385 kcal
- Sugar: 18g
- Sodium: 190mg
- Fat: 12g
- Saturated Fat: 3.5g
- Unsaturated Fat: 7.5g
- Trans Fat: 0g
- Carbohydrates: 58g
- Fiber: 10g
- Protein: 14g
- Cholesterol: 15mg