Todavía recuerdo la primera vez que preparé este guiso. Fue durante unas vacaciones en la costa, cuando un pescador local me ofreció camarones tan frescos que prácticamente brillaban bajo el sol de la tarde. Con algunos tomates maduros que había comprado en el mercado esa mañana y unas cuantas especias básicas, improvisé este guiso que desde entonces se ha convertido en una receta emblemática en mi hogar.
Lo que comenzó como una necesidad —preparar algo rápido pero delicioso con ingredientes frescos— se transformó en uno de esos platos que traen consigo recuerdos de brisa marina y conversaciones relajadas. Cada vez que lo cocino, mi cocina se llena de aromas que me transportan a aquellas vacaciones, y ese sentimiento de bienestar es justamente lo que espero compartir contigo a través de esta receta.
Por qué te enamorarás de esta receta
Este guiso no es simplemente otra receta más en tu repertorio, sino una verdadera joya culinaria por varias razones:
- Equilibrio perfecto de sabores: La dulzura natural de los camarones y el maíz se complementa maravillosamente con la acidez de los tomates y el toque picante de las especias.
- Nutritivo y completo: Rico en proteínas, vitaminas y minerales, este plato ofrece una comida equilibrada en un solo recipiente.
- Versátil y adaptable: Puedes ajustar fácilmente el nivel de picante o sustituir ingredientes según lo que tengas disponible en tu despensa.
- Impresionantemente sencillo: A pesar de su sofisticado sabor, es sorprendentemente fácil de preparar, incluso para cocineros principiantes.
- Ideal para cualquier temporada: Reconfortante en invierno y lo suficientemente ligero para disfrutarlo también en los meses más cálidos.
Además, este guiso mejora con el tiempo, lo que significa que las sobras del día siguiente serán aún más sabrosas cuando los sabores hayan tenido tiempo de integrarse completamente.
Ingredientes necesarios
Ingredientes principales:
- 450 g de camarones grandes, pelados y desvenados
- 2 tazas de tomates cortados en cubitos (enlatados o frescos)
- 1 taza de granos de maíz (frescos, congelados o enlatados)
- 1 pimiento verde, cortado en cubitos
- 1 cebolla mediana, picada
- 3 dientes de ajo, picados finamente
- 1 cucharadita de pimentón
- 1 cucharadita de pimienta de cayena (ajustar al gusto)
- 1 cucharadita de orégano seco
- 4 tazas de caldo de verduras o de marisco
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta negra al gusto
Para servir:
- 1 cucharada de perejil fresco picado (para decorar)
- Hojuelas de pimiento rojo (opcional, para servir)
- Pan crujiente o arroz blanco como acompañamiento

Instrucciones paso a paso
1. Preparación de la base aromática
En una olla grande o cacerola tipo Dutch oven, vierte el aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio. Una vez que el aceite esté caliente, incorpora la cebolla picada y el pimiento verde cortado en cubitos. Sofríe estos ingredientes juntos hasta que la cebolla se vuelva translúcida, lo que debería tomar aproximadamente 5 minutos. Durante este proceso, remueve ocasionalmente para asegurar una cocción uniforme. Esta base aromática constituirá el fundamento de sabores sobre el cual construiremos nuestro guiso.
2. Incorporación de especias y aromatizantes
Ahora es el momento de intensificar los aromas. Añade el ajo finamente picado, el pimentón, la pimienta de cayena y el orégano seco a la olla. Cocina esta mezcla durante un minuto adicional, removiendo constantemente para evitar que el ajo se queme. Pronto notarás cómo la cocina se llena de un aroma irresistible mientras las especias liberan sus aceites esenciales y sabores. Este paso es crucial para despertar el perfil aromático de nuestro guiso.
3. Adición de los ingredientes principales
A continuación, incorpora los tomates cortados en cubitos (asegúrate de incluir su jugo si estás usando tomates enlatados) y los granos de maíz. Mezcla todos los ingredientes hasta que estén bien combinados, permitiendo que los sabores comiencen a integrarse. Después, vierte cuidadosamente el caldo de verduras o de marisco en la olla. Lleva la mezcla a ebullición y, una vez que comience a hervir, reduce el fuego para que el guiso pueda cocer a fuego lento durante aproximadamente 10 minutos. Este período de cocción lenta permite que todos los ingredientes se amalgamen armoniosamente.
4. Cocción de los camarones y ajuste de sazón
Tras el período de cocción a fuego lento, es momento de ajustar el sabor del guiso. Prueba un poco del caldo y añade sal y pimienta negra según sea necesario, recordando que los camarones también aportarán algo de salinidad natural. Con el guiso ya sazonado, incorpora suavemente los camarones a la olla. Cocina hasta que los camarones cambien a un tono rosado y estén completamente cocidos, lo que generalmente toma unos 5 minutos. Es importante vigilar atentamente este proceso, ya que los camarones se cocinan rápidamente y pueden volverse gomosos si se pasan de cocción.
5. Presentación final y servicio
Una vez que los camarones estén perfectamente cocidos, retira la olla del fuego. Para darle un toque final de frescura y color, espolvorea el perejil recién picado por encima del guiso. Si prefieres un poco más de picante, añade algunas hojuelas de pimiento rojo según tu gusto personal. Sirve el guiso caliente, idealmente acompañado de un buen pan crujiente para mojar en el sabroso caldo o sobre una cama de arroz blanco que absorberá todos esos deliciosos sabores.
Sugerencias para servir
Este versátil guiso puede presentarse de diferentes maneras según la ocasión:
- Para una cena informal: Sirve directamente en cuencos hondos acompañados de pan de masa madre ligeramente tostado para mojar en el caldo.
- Como plato principal elegante: Presenta sobre una cama de arroz integral o quinoa para una comida nutritiva y completa. Añade una rodaja de limón al borde del plato para un toque cítrico adicional.
- Para un brunch especial: Sirve en cuencos pequeños como entrante sofisticado, acompañado de una copa de vino blanco seco.
- Versión tapas: Para una reunión informal, sirve pequeñas porciones en vasitos individuales como parte de una selección de tapas variadas.
Variaciones de la receta
Esta receta es extremadamente adaptable. Aquí te presento algunas deliciosas variaciones para explorar:
Versión mediterránea
Añade 1/2 taza de aceitunas kalamata deshuesadas y 2 cucharadas de alcaparras durante los últimos minutos de cocción. Finaliza con un poco de queso feta desmenuzado por encima justo antes de servir.
Opción más cremosa
Incorpora 1/2 taza de crema espesa o leche de coco al final de la cocción para obtener un guiso más rico y cremoso. Ajusta la sal después de añadir estos ingredientes.
Variante con chorizo
Añade 100g de chorizo español en rodajas finas al principio, cocinándolo junto con la cebolla y el pimiento para infundir el aceite con su sabor ahumado y picante.
Para amantes de los mariscos
Convierte este guiso en una fiesta marinera añadiendo 200g de mejillones limpios y/o 150g de calamar cortado en anillos junto con los camarones. Ajusta el tiempo de cocción según sea necesario para cada tipo de marisco.
Consejos para preparar con anticipación
Esta receta se presta perfectamente para la planificación de comidas:
- Preparación previa: Puedes picar todos los vegetales y medir las especias con hasta dos días de antelación. Guárdalos en recipientes herméticos separados en el refrigerador.
- Cocción parcial: El guiso base (sin los camarones) puede prepararse con hasta un día de anticipación. Cuando estés listo para servir, recalienta el guiso hasta que esté caliente, luego añade los camarones frescos y completa la receta.
- Almacenamiento: Las sobras se conservan bien en el refrigerador hasta por 2 días en un recipiente hermético. Ten en cuenta que los camarones pueden perder algo de su textura ideal después del primer día.
- Congelación: Si planeas congelar, es mejor hacerlo sin los camarones. Cuando desees consumirlo, descongela el base, caliéntalo y añade camarones frescos durante los últimos minutos de cocción.
- Recalentamiento: Calienta a fuego lento, evitando hervir vigorosamente para mantener la textura de los camarones si ya están incluidos.
Notas del chef
- Secreto del sabor: Para un sabor más profundo, considera tostar ligeramente las especias secas en una sartén antes de añadirlas. Esto libera sus aceites esenciales y aporta una dimensión adicional al plato.
- Selección de camarones: Siempre que sea posible, elige camarones frescos de tamaño mediano-grande (21-25 por libra). Su textura y sabor son superiores a los más pequeños, que pueden sobrecocinarse fácilmente.
- El truco del maíz: Si usas maíz fresco de la mazorca, guarda los olotes y añádelos al caldo mientras se cocina el guiso base. Retíralos antes de añadir los camarones. Aportarán un dulzor natural adicional.
- Equilibrio de acidez: Si los tomates resultan demasiado ácidos, una pizca de azúcar (aproximadamente 1/4 cucharadita) puede equilibrar perfectamente el sabor sin endulzar el guiso.
- Presentación profesional: Para un aspecto de restaurante, reserva algunos camarones y perejil para colocarlos encima justo antes de servir. Este pequeño detalle visual hace una gran diferencia en la presentación.

Preguntas frecuentes
¿Puedo usar camarones congelados?
Sí, pero asegúrate de descongelarlos completamente y secarlos con papel absorbente antes de añadirlos al guiso. El exceso de agua puede diluir los sabores y afectar la consistencia final.
No tengo pimienta de cayena, ¿qué puedo usar en su lugar?
Puedes sustituirla por hojuelas de chile rojo, salsa picante o incluso una pizca de chile en polvo. Si prefieres una versión menos picante, simplemente omítela o reduce la cantidad.
¿Este guiso se puede hacer en olla de cocción lenta?
¡Absolutamente! Sofríe primero la cebolla, el pimiento y las especias en una sartén, luego transfiere todo a la olla de cocción lenta junto con los tomates, el maíz y el caldo. Cocina a temperatura baja durante 3-4 horas o alta durante 1-2 horas. Añade los camarones durante los últimos 30 minutos de cocción.
¿Qué tipo de tomates funcionan mejor?
Los tomates enlatados cortados en cubitos funcionan perfectamente por su consistencia y sabor concentrado. Si usas tomates frescos, elige variedades maduras y carnosas como Roma o tomates de pera, y considera añadir una cucharada de pasta de tomate para intensificar el sabor.
Mi guiso está demasiado líquido, ¿cómo puedo espesarlo?
Si deseas un guiso más espeso, puedes mezclar 1 cucharada de maicena con 2 cucharadas de agua fría hasta formar una pasta suave, y luego incorporarla al guiso mientras hierve suavemente, removiendo constantemente hasta alcanzar la consistencia deseada.
PrintGuiso de Tomate y Camarones
Todavía recuerdo la primera vez que preparé este guiso. Fue durante unas vacaciones en la costa, cuando un pescador local me ofreció camarones tan frescos que prácticamente brillaban bajo el sol de la tarde. Con algunos tomates maduros que había comprado en el mercado esa mañana y unas cuantas especias básicas, improvisé este guiso que desde entonces se ha convertido en una receta emblemática en mi hogar.
Lo que comenzó como una necesidad —preparar algo rápido pero delicioso con ingredientes frescos— se transformó en uno de esos platos que traen consigo recuerdos de brisa marina y conversaciones relajadas. Cada vez que lo cocino, mi cocina se llena de aromas que me transportan a aquellas vacaciones, y ese sentimiento de bienestar es justamente lo que espero compartir contigo a través de esta receta.
- Prep Time: 10 minutos
- Cook Time: 20 minutos
- Total Time: 30 minutos
- Yield: 4 porciones 1x
- Category: Plato principal
- Method: Cocción en olla
- Cuisine: Mediterránea
Ingredients
Ingredientes principales:
- 450 g de camarones grandes, pelados y desvenados
- 2 tazas de tomates cortados en cubitos (enlatados o frescos)
- 1 taza de granos de maíz (frescos, congelados o enlatados)
- 1 pimiento verde, cortado en cubitos
- 1 cebolla mediana, picada
- 3 dientes de ajo, picados finamente
- 1 cucharadita de pimentón
- 1 cucharadita de pimienta de cayena (ajustar al gusto)
- 1 cucharadita de orégano seco
- 4 tazas de caldo de verduras o de marisco
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta negra al gusto
Para servir:
- 1 cucharada de perejil fresco picado (para decorar)
- Hojuelas de pimiento rojo (opcional, para servir)
- Pan crujiente o arroz blanco como acompañamiento
Instructions
En una olla grande o cacerola tipo Dutch oven, vierte el aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio. Una vez que el aceite esté caliente, incorpora la cebolla picada y el pimiento verde cortado en cubitos. Sofríe estos ingredientes juntos hasta que la cebolla se vuelva translúcida, lo que debería tomar aproximadamente 5 minutos. Durante este proceso, remueve ocasionalmente para asegurar una cocción uniforme. Esta base aromática constituirá el fundamento de sabores sobre el cual construiremos nuestro guiso.
Ahora es el momento de intensificar los aromas. Añade el ajo finamente picado, el pimentón, la pimienta de cayena y el orégano seco a la olla. Cocina esta mezcla durante un minuto adicional, removiendo constantemente para evitar que el ajo se queme. Pronto notarás cómo la cocina se llena de un aroma irresistible mientras las especias liberan sus aceites esenciales y sabores. Este paso es crucial para despertar el perfil aromático de nuestro guiso.
A continuación, incorpora los tomates cortados en cubitos (asegúrate de incluir su jugo si estás usando tomates enlatados) y los granos de maíz. Mezcla todos los ingredientes hasta que estén bien combinados, permitiendo que los sabores comiencen a integrarse. Después, vierte cuidadosamente el caldo de verduras o de marisco en la olla. Lleva la mezcla a ebullición y, una vez que comience a hervir, reduce el fuego para que el guiso pueda cocer a fuego lento durante aproximadamente 10 minutos. Este período de cocción lenta permite que todos los ingredientes se amalgamen armoniosamente.
Tras el período de cocción a fuego lento, es momento de ajustar el sabor del guiso. Prueba un poco del caldo y añade sal y pimienta negra según sea necesario, recordando que los camarones también aportarán algo de salinidad natural. Con el guiso ya sazonado, incorpora suavemente los camarones a la olla. Cocina hasta que los camarones cambien a un tono rosado y estén completamente cocidos, lo que generalmente toma unos 5 minutos. Es importante vigilar atentamente este proceso, ya que los camarones se cocinan rápidamente y pueden volverse gomosos si se pasan de cocción.
Una vez que los camarones estén perfectamente cocidos, retira la olla del fuego. Para darle un toque final de frescura y color, espolvorea el perejil recién picado por encima del guiso. Si prefieres un poco más de picante, añade algunas hojuelas de pimiento rojo según tu gusto personal. Sirve el guiso caliente, idealmente acompañado de un buen pan crujiente para mojar en el sabroso caldo o sobre una cama de arroz blanco que absorberá todos esos deliciosos sabores.
Notes
- Secreto del sabor: Para un sabor más profundo, considera tostar ligeramente las especias secas en una sartén antes de añadirlas. Esto libera sus aceites esenciales y aporta una dimensión adicional al plato.
- Selección de camarones: Siempre que sea posible, elige camarones frescos de tamaño mediano-grande (21-25 por libra). Su textura y sabor son superiores a los más pequeños, que pueden sobrecocinarse fácilmente.
- El truco del maíz: Si usas maíz fresco de la mazorca, guarda los olotes y añádelos al caldo mientras se cocina el guiso base. Retíralos antes de añadir los camarones. Aportarán un dulzor natural adicional.
- Equilibrio de acidez: Si los tomates resultan demasiado ácidos, una pizca de azúcar (aproximadamente 1/4 cucharadita) puede equilibrar perfectamente el sabor sin endulzar el guiso.
- Presentación profesional: Para un aspecto de restaurante, reserva algunos camarones y perejil para colocarlos encima justo antes de servir. Este pequeño detalle visual hace una gran diferencia en la presentación.
Nutrition
- Serving Size: 1 taza
- Calories: 240 kcal
- Sugar: 5g
- Sodium: 750mg
- Fat: 8g
- Saturated Fat: 1g
- Unsaturated Fat: 6g
- Trans Fat: 0g
- Carbohydrates: 16g
- Fiber: 3g
- Protein: 25g
- Cholesterol: 170mg