Esta pasta con alcachofas y hierbas frescas es una receta sencilla, ligera y llena de sabor. Combinando corazones de alcachofa, ajo salteado, limón y un toque de queso parmesano, cada bocado es fresco y aromático. Es ideal para una comida rápida entre semana o una cena informal, ya que se prepara en menos de 30 minutos y se puede adaptar fácilmente con los ingredientes que tengas a mano.
Desglose de ingredientes y sustituciones
Pasta: Linguine o espaguetis funcionan mejor, pero puedes usar fettuccine, penne u otra pasta que tengas. Solo asegúrate de cocerla al dente para que mantenga su textura.
Corazones de alcachofa: Los enlatados son prácticos y sabrosos. También puedes usar alcachofas congeladas (descongeladas y escurridas), o incluso alcachofas a la parrilla para un sabor más intenso.
Ajo: El ajo fresco es esencial. Si no tienes, puedes usar ajo en polvo, pero el sabor no será tan aromático.
Hierbas frescas: Perejil y albahaca dan frescura. Si no tienes frescas, usa hierbas secas (1/3 de la cantidad indicada). También puedes probar con tomillo o eneldo.
Queso parmesano: Aporta ese toque salado y umami. Como alternativa, puedes usar Pecorino Romano (más intenso) o levadura nutricional si prefieres una versión vegana.

¿Cómo saltear ajo sin que se queme?
Usa fuego medio y observa con atención: solo necesita un minuto para soltar su aroma.
Si la sartén se calienta demasiado, añade un chorrito de agua o del agua de cocción de la pasta.
Remueve constantemente para que no se pegue ni se queme.
Si se quema, mejor empezar de nuevo que arruinar el sabor del plato.
Ingredientes
Pasta y vegetales:
- 8 oz (225 g) de linguine o espaguetis
- 1 lata (400 g) de corazones de alcachofa, escurridos y picados
- 3 dientes de ajo, picados
Mezcla de hierbas y condimentos:
- 1/4 taza de aceite de oliva extra virgen
- 1/2 taza de perejil fresco picado
- 1/4 taza de albahaca fresca picada
- 1/4 taza de queso parmesano rallado (más para servir)
- 1 limón (ralladura y jugo)
- Sal y pimienta al gusto
- Opcional: hojuelas de chile rojo para un toque picante
Receta paso a paso
1. Cocina la pasta:
Hierve la pasta en agua con sal hasta que esté al dente. Reserva 1 taza del agua de cocción antes de escurrirla.
2. Saltea el ajo:
Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Añade el ajo picado y saltea durante 1 minuto hasta que esté fragante (no lo dejes dorar demasiado).
3. Agrega las alcachofas:
Incorpora los corazones de alcachofa picados y cocínalos por 3–4 minutos hasta que estén calientes y ligeramente dorados.
4. Prepara la salsa de limón:
Agrega el jugo y la ralladura del limón junto con 1/2 taza del agua de la pasta. Remueve todo y deja que la mezcla se integre durante 1 minuto.
5. Combina con la pasta:
Agrega la pasta cocida a la sartén y mézclala bien para que se impregne de la salsa. Si está muy seca, añade más agua de la cocción hasta alcanzar la consistencia deseada.
6. Añade las hierbas y el queso:
Incorpora el perejil, la albahaca y el queso parmesano. Ajusta sal, pimienta y, si deseas, un poco de chile en hojuelas. Mezcla todo bien.
7. Sirve:
Sirve caliente, decorando con más parmesano y hierbas frescas por encima. ¡Disfruta de esta deliciosa y sencilla pasta con sabor mediterráneo!
Errores comunes a evitar
No escurrir bien las alcachofas: el exceso de líquido puede aguar la salsa.
Quemar el ajo: vigila el fuego y remueve constantemente.
No reservar agua de cocción: es clave para ajustar la textura de la salsa.
Tips y variaciones
Agrega espinaca baby al final de la cocción para un extra verde.
Usa ralladura de limón extra si te gusta el sabor cítrico más marcado.
Para una versión más cremosa, añade una cucharada de yogur griego o crema justo antes de servir.
Conservación y recalentado
Refrigeración: Guarda en un recipiente hermético hasta por 3 días.
Recalentado: Calienta en sartén con un chorrito de agua o aceite para devolverle la textura.
Combínalo con…
Pan rústico o focaccia
Ensalada caprese
Un vino blanco seco como Pinot Grigio o Sauvignon Blanc
Preguntas frecuentes
¿Puedo usar pasta sin gluten?
Sí, cualquier tipo que prefieras funciona bien aquí.
¿Puedo omitir el queso?
Claro. Usa levadura nutricional si buscas un sabor similar sin lácteos.
¿Puedo usar alcachofas frescas?
Sí, pero deberás cocerlas previamente. Las versiones enlatadas o congeladas ahorran tiempo.